EL PERIÓDICO DE CATALUNYA VETA EL DERECHO DE RECTIFICACIÓN

-A raíz de la publicación del artículo titulado “Crimen Perfecto” el pasado 27-4-08, firmado por Mayka Navarro (El Periódico de Catalunya), sobre el trágico suceso ocurrido en la calle Camprodón del barrio de Gràcia de Barcelona el pasado 19-21 de Febrero (y otro en igual sentido publicado el mismo día en el diario “El País”).


Durante ese domingo 27-4-2008, la titular del Juzgado de Instrucción nº 25, Elena Carasol, prohibió informar del presunto asesinato, amparándose en que la investigación no había concluido y el secreto sumarial continuaba vigente. Desde ese momento y hasta el martes 13-5-2008, fecha en la que se levantó el secreto de sumario,“El Periódico de Catalunya” principalmente y otros medios publicaron un verdadero alud de artículos discrepantes contra la medida adoptada por la juez basándose en lo que para ellos era un veto a la libertad de prensa e información; no pretendo hacer ningún tipo de valoraciones, lo que sí me parece inaceptable es que la prensa se ampare en la libertad de expresión y el derecho a la información e ignore totalmente mi petición como afectado y perjudicado a publicar la carta que escribí acogiéndome al derecho de rectificación, réplica o aclaración, tal y como recoge el artículo 1 de la Ley Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, que especifica lo siguiente:


“Toda persona, natural o jurídica, tiene derecho a rectificar la información difundida, por cualquier medio de comunicación social, de hechos que le aludan, que considere inexactos y cuya divulgación pueda causarle perjuicio.
Podrán ejercitar el derecho a rectificación el perjudicado aludido o sus representantes y, si hubiese fallecido aquél, sus herederos o los representantes de éstos.”


Dicho esto, es evidente que han sido coartados mis derechos, y ante mi negativa a obtener la publicación de la carta en los medios nombrados por vía judicial, he optado por publicarla en este blog personal a través de Internet, la cual por suerte no esta manejada a su antojo por los mismos y creo que así podré gozar de un mínimo de libertad e independencia.
La carta en cuestión la he titulado “carta por Ana” y es la que figura a continuación.


Barcelona a 11 de junio de 2008